Separadores de ambientes

Hoy en día encontramos muchas casas con amplios espacios donde varios ambientes comparten metros. Sin ambargo, a veces, aunque queramos contar con esa amplitud y comunicación, también queremos separarlos de alguna manera, sin tabiques, una manera de seguir manteniendo una amplitud visual y de espacio pero diferenciando con piezas ligeras y especiales algún rincón que nos gusta que guarde una cierta intimidad.

Para todo esto, contamos con unas piezas muy especiales, los separadores de ambientes, que a modo de celosía y con diferentes y creativos diseños, nos ofrecen un amplio y original abanico de posibilidades, de las que hoy, veremos algunos ejemplos. Vamos allá? 🙂

En este primer caso vemos una moderna y colorida oficina en la que se han creado una especie de salas independientes con el uso de unos separadores de ambientes muy sencillos a modo de simples listones de madera que van de suelo a techo. Dejan pasar la luz y no convierten cada espacio en una especie de cubículo, si no que da amplitud visual y comunicativa 😉

En este otro caso, vemos una sencilla manera de disimular una cocina americana, separándola del comedor por un tipo de separador de ambientes con diferente diseño al anterior pero siguiendo el mismo criterio.

En un estudio, donde el dormitorio comparte espacios abierto con el resto de la casa, es muy interesante el uso de los separadores de ambientes. No cierras completamente el espacio y al mismo tiempo le aportas el aire íntimo que todo dormitorio pide a gritos, como en este caso con una original pieza en negro y un diseño muy especial.

Este original separador cuya parte superior, manteniendo una cierta distancia, sigue la línea de un techo a dos aguas, mezcla diferentes diseños a modo de listones cruzados de madera, que en este caso, crea una zona más íntima para el comedor.

El siguiente espacio, en blanco y negro, cuenta con un separador de ambientes colocado tras el sofá, con un aire algo más clásico y un diseño que se adapta a la perfección a una decoración más romántica.

En estos dos últimos casos, vemos otro ejemplo de cómo separar el dormitorio de la zona de estar con unos sencillos separadores a modo de barrotes negros. Una estructura muy ligera que permite nuevamente el paso de luz para unos espacios algo más minimalistas.

Bueno pues ya os he enseñado algunos ejemplos (aunque me queda pendiente uno muy interesante que prometo enseñaros muy pronto jejeje) Espero que os haya gustado, y si tenéis espacios así en vuestra casa y buscáis algo de intimidad para alguna zona, os animéis a probar estos separadores de ambientes, que como veis, existen con múltiples diseños y materiales.

Feliz martes!!!

MariAngel