Aunque estos días todo se inunda de Navidad… también es bueno salirse un poco de la horma del zapato, no os parece? 😉 Así que hoy os traigo un bonito apartamento nórdico con cierto aire bohemio. Un apartamento cuya paleta de colores está basada en el blanco y el gris, ese color que para muchos es apagado y frío pero que bien combinado y con pequeños detalles crea espacios cálidos y elegantes.
El salón es un bonito espacio donde se combina lo contemporáneo con algo más clásico (detalles de molduras, puertas etc…) y el característico aire desenfadado del estilo bohemio reflejado en el sofá y la lámpara. Con una alfombra… ya sería absolutamente encantador 🙂
El salón se conecta con en comedor a través de unas puertas francesas
El comedor combina el sencillo aire nórdico con una consola de madera de estilo rústico. Este conjunto se vuelve especial con una moderna lámpara de burbujas de cristal, bonitos detalles decorativos y unas plantas… que como siempre digo, aportan el color necesario a los espacios sobrios 😉
En el dormitorio… sobran las palabras, un aire también ligeramente bohemio que aporta la lámpara y una clave… la sencillez. Es un ambiente acogedor y adorable.
Un baño en blanco siempre resulta limpio y luminoso. Cada día me gusta más que en estos espacios se utilice el contraste de suelos oscuros y paredes claras. Luminosidad, funcionalidad y mucho mejor mantenimiento 😉
Espero que os haya resultado refrescante este paréntesis en medio del espíritu navideño jeje y sobretodo… que hayáis podido ver una vez más, como el uso de tonos neutros y sobrios no implica frialdad, como siempre… todo se basa en realizar las combinaciones acertadas y lo frío se convierte instantáneamente en cálido 😉
Que tengáis un buen día
MariAngel
