Hace poco pasé unos días en Cracovia, y prometí traeros algunas fotos de mi viaje, así que hoy nos vamos hasta Cracovia, Polonia 😉 Tuvimos algo de mala suerte con el tiempo, nublado, algo frío y lluvioso pero vi cosas muy bonitas que merecía la pena compartir con vosotros 🙂
La Plaza del Mercado de Cracovia (Rynek Główny) es absolutamente impresionante, con sus 40.000 metros cuadrados, se trata de la plaza medieval más grande de Europa. En ella encontramos un montón de bonitas y agradables terrazas llenas de flores, que le dan un aire muy especial a todo el entorno y unos bonitos coches de caballos perfectamente engalanados como podéis ver…
Esta foto que os muestro a continuación la he buscado para poder daros una visión de la plaza tal y como yo la vi, aunque en mi caso el cielo… no era tan azul jeje.
En los días que estuve allí coincidió que en esta plaza había de todo… el mercado de las flores, actuaciones tradicionales, etc…
Como veis… hacen maravillas con las flores 😉
En la misma plaza, está la Lonja de Paños (Sukiennice) en la planta baja del edificio central y donde podemos encontrar numerosos puestos, como éste de ámbar, que es uno de los productos más representativos de Polonia.
De nuevo en la plaza… entontramos puestos callejeros como éste donde sirven algo muy típico, un queso a la parrilla con mermelada de frambuesa… riquísimo! 😉
Y por supuesto, no pueden faltar los caramelos…
Esta imagen es muy representativa de los que os comentaba de las terrazas. Es una auténtica maravilla. Terrazas cuidadas, llenas de flores y detalles que le dan un encanto muy especial.
Uno de los días que estuve allí, tuve la suerte de que me invitasen a comer en uno de los restaurantes más conocidos de Cracovia, el Wesele. Un lugar donde además de comer de maravilla, te encuentras con unos magníficos detalles decorativos, de los que la máxima representación es esta impresionante lámpara de flores naturales que te recibe a la entrada del local, todo un lujo para los sentidos.
Antiguamente el centro histórico medieval de Cracovia estaba protegido por una muralla con ocho puertas de acceso a la ciudad. Hoy en día, en lugar de muralla, la zona antigua está rodeada por una franja de zona verde. Sin embargo quedan zonas en las que permanece la muralla como podemos ver aquí.
Otra cosa que os recomiendo si viajáis a Cracovia es visitar las Minas de Sal, una maravilla en la que todo está construído por sal, como las impresionantes lámparas que véis en esta foto.
Las zonas verdes de Cracovia son una preciosidad que no tuve la oportunidad de disfrutar como me hubiera gustado, pero para la próxima… me toca! jeje A orillas del río Vístula encontramos una amplia zona verde con su paseo, digna de recorrer 😉
Esta zona verde se encuentra a los pies del Castillo de Wawel, un impresionante complejo arquitectónico de estilo gótico que, con el paso de los años y las posteriores remodelaciones, adquirió un aire renacentista. Los interiores son bonitos pero a mi lo que verdaderamente me enamoró fueron sus exteriores, la arquitectura de las distintas zonas del castillo y sus jardines son todo un lujo.
Pues hasta aquí lo que os puedo mostrar de este viaje. Y ahora me despido con una imagen que compartí con vosotros hace días en las redes sociales y que me parece que representa muy bien todo lo que os he contado en referencia a la búsqueda del detalle y flores adornando cualquier esquina.
Espero que os haya gustado pasear conmigo por Cracovia 😉
Hasta el próximo día!!!
MariAngel
