Annika, la propietaria de esta vivienda, es escritora, se trasladó a esta casa buscando una atmósfera en la que se respira paz y serenidad, lo que le permite escribir en el ambiente ideal. Una paleta de colores neutros, que quizás de entrada pudiera parecer aburrida, se llena de encanto con piezas delicadas y de un gusto exquisito. Unas combinaciones perfectas para crear unos espacios llenos de un lujo clásico y sereno. Ese lujo clásico se moderniza con detalles sutilmente actuales como la forma de colocar los marcos con fotos, tras un magnífico sofá con fundas de lino, de lo más acogedor, el diseño de la mesita de café, de líneas rectas…